Hipotalamico

JC1 Veterinarios resonancia magnética

El diencéfalo es la parte caudal del prosencéfalo (cerebro anterior) compuesto por el epitálamo (habénula, cuerpo pineal), tálamo, hipotálamo y un subtálamo (núcleo subtalámico, núcleo endopeduncular, y la zona incerta).

El hipotálamo es la región ventral y medial del diencéfalo, formando las paredes de la mitad ventral del tercer ventrículo. Se extiende desde el quiasma óptico hasta los cuerpos mamilares. El hipotálamo se extiende ventralmente siendo el infundíbulo (tallo hipofisario), y una expansión distal que resulta en la glándula pituitaria.

La glándula pituitaria (hipófisis) consiste de la adenohipófisis (pars distalis, intermedia y tuberalis) y de la neurohipófisis (pars nervosa). La neurohipófisis (lóbulo posterior) está asociada con el almacenamiento y liberación de oxitocina y hormona antidiurética. La adenohipófisis tiene que ver con la secreción de somatotropina, prolactina, hormona estimulante de la tiroides, gonadotropinas, corticotropina adrenal y otros péptidos relacionados.
Los signos clínicos asociados con lesión del diencéfalo son poco comunes, pero cuando ocurren, a menudo son el resultado de una lesión hipotalámica, y usualmente asociada con tumores pituitarios.

El hipotálamo está íntimamente involucrado en funciones autonómicas víscerales, incluyendo el apetito, actividad sexual, ciclo de sueño y vigilia, temperatura corporal, regulación de la presión sanguínea, ritmo cardiaco y emociones.

También regula muchas de las actividades endocrinas del cuerpo.

Los animales con un síndrome hipotalámico pueden mostrar signos de un estado mental alterado (p.e., desorientación, letargia ó coma); y/o cambios en la conducta (p.e., agresión, hiperexcitabilidad, caminar de un lado a otro, caminatas errantes, tendencia a ocultarse, caminatas en círculos pequeños, presión de la cabeza contra objetos y temblores).

La marcha es usualmente normal.

La regulación anormal de la temperatura puede manifestarse como hipertermia, hipotermia, ó poiquilotermia. Pueden verse anormalidades en el apetito como hiperfagia y obesidad, ó anorexia y caquexia.

La visión puede estar frecuentemente afectada si la lesión involucra al quiasma óptico, en cuyo caso las pupilas pueden estar dilatadas y con respuesta débil ó ausente al estímulo de luz.

Las alteraciones endocrinas a menudo incluyen diabetes insípida ó hiperadrenocorticismo (los signos clínicos incluyen polidipsia, poliuria, alopecia, abdomen penduloso, y debilidad muscular).

El 80% ó más de los casos de hiperadrenocorticismo dependientes de la pituitaria en perros son asociados con tumores de glándula pituitaria (comúnmente adenomas cromófobos). Las anormalidades en el metabolismo de los carbohidratos (p.e., hiperglicemia) también pueden ser detectadas en perros y gatos.

En los gatos, los adenomas pituitarios acidófilos han sido asociados con acromegalia y algunos signos del sistema nervioso (como caminar en círculos y convulsiones), acompañados por diabetes mellitus resistente a la insulina y altas concentraciones en suero de hormona del crecimiento. Más del 75% de los gatos con síndrome de Cushing tienen diabetes mellitus.

Se han observado hemorragias dentro de un adenoma pituitario con compresión secundaria del hipotálamo provocando "apoplejía hipofisaria" en una hembra Pastor Alemán de 7 años de edad con diabetes insípida central, hipernatremia, hipertermia y deficiencias visuales.

En humanos, un "síndrome diencefálico" se caracteriza por emaciación, a pesar de ingesta calórica normal ó ligeramente disminuida, anormalidades endocrinas y apariencia de alerta mental.

Este síndrome usualmente aparece en infantes y niños y es tipicamente asociado con lesiones que ocupan parte de la región del quiasma óptico-hipotálamo (especialmente astrocitomas).

Una condición similar se ha reportado en una perra Doberman Pinscher de tres años de edad, asociada con un astrocitoma en el hipotálamo rostral, con signos de pérdida crónica de peso con adecuada ingesta calórica, estado mental de alerta, bradicardia, hipotermia y ausencia de escalofríos, falta de sed a pesar del balance negativo de agua e hipotiroidismo.

Signos principales del síndrome hipotalámico

  • Marcha normal
  • Estado mental alterado
  • desorientación, letargia ó coma
  • Cambios de conducta
  • agresión ó hiperexcitabilidad
  • Movimientos y posturas anormales
  • temblores, caminar de un lado a otro, caminar sin rumbo, tendencia a esconderse, vueltas en círculos pequeños ó presión con la cabeza
  • Deficiencia bilateral en el nervio Craneal II (óptico) al nivel del quiasma óptico
  • visión alterada
  • pupilas dilatadas
  • reflejos en pupilas deprimidos
  • Regulación anormal de la temperatura
  • hipertermia, hipotermia, ó poiquilotermia
  • Apetito anormal
  • hiperfagia/obesidad, ó anorexia/caquexia
  • Alteraciones endocrinas
  • diabetes insípida
  • diabetes mellitus
  • hiperadrenocorticismo
  • acromegalia/exceso de hormona del crecimiento
  • Convulsiones

 

 

 

Enfermedades asociadas con el síndrome hipotalámico

  • Desórdenes degenerativos Ninguna
  • Desórdenes degenerativos estructurales ó por compresión Ninguna
  • Desórdenes del desarrollo Ninguna
  • Desórdenes metabólicos endógenos Ninguna
  • Desórdenes inflamatorios Abscesos; moquillo; peritonitis infecciosa felina; meningoencefalomielitis granulomatosa; enfermedades micóticas; encefalomielitis parasitaria; toxoplasmosis y neosporosis
  • Neoplasias Tumores cerebrales
  • Desórdenes neurotóxicos Ivermectina
  • Desórdenes neurovasculares Infartos; hemorragias
  • Desórdenes nutricionales Deficiencia de tiamina
  • Desórdenes de almacenamiento Ninguna
  • Traumatismos Traumatismo craneal

 

a) Los tumores cerebrales asociados con un síndrome diencefálico muy comúnmente son tumores pituitarios, aunque ocasionalmente pueden estar implicados tumores de las células germinales supraselares y malformaciones tumorales (incluyendo teratomas). En los perros, los craneofaringeomas son tumores supraselares raros que pueden causar daño hipofisario-hipotalámico. La extensión de tumores primarios de la cavidad nasal (p.e., adenocarcinoma nasal) hacia la bóveda craneal es relativamente común, y estas masas pueden involucrar a la base del cerebro y el área pituitaria.
b) Los hamartomas hipotalámicos son malformaciones tumorales raras que pueden estar asociadas con ataques similares a la cataplexia.
c) Las lesiones específicas del tálamo parecen ser muy raras en perros y gatos, aunque lesiones del tálamo rostral pueden estar asociadas a un "síndrome adverso" caracterizado por ladeo, caminatas en círculos, y/o desviación de los ojos hacia el lado de lesión. A veces puede observarse hipoalgesia contralateral asociada con lesiones en las proyecciones de relevo talámicas a la corteza cerebral.
d) Las convulsiones pueden ocurrir por lesiones masivas extendiendose hacia la corteza cerebral y/o por la presión intracraneal incrementada, ó por alteraciones en las fibras de proyección del tálamo a la corteza cerebral, por ejemplo, la ausencia generalizada de convulsiones en humanos.
e) Las causas más comunes de síndrome diencefálico vistas en la práctica son:
- Neoplasias p.e., tumores pituitarios ó de extensión (P)
- Masas granulomatosas, p.e., toxoplasmosis y neosporosis, meningoencefalomielitis granulomatosa, ó enfermedades micóticas tales como criptococosis y blastomicósis (P + G)